Abandono II

¿Cuántos pedos se tiró ese día? Puuuuuuuuta madre. Casi los mismos que Napoleón en Waterloo... El mismo número que Obama cuando ganó la presidencia en Estados Unidos y dijo: In change we trust... y pura parada. esos gases que salían de su culo no sólo eran OLOROSOS, sino que llevaban premio... y en las noches sentía la mierda pegada al calzón, rozando sus nalgas y no le importaba.

Sabía que era una señal.

Si somos el único animal que se puede llenar otra parte del cuerpo de caca... y que hay algunos coprófagos que hasta en el hosais (Hocico->hocique->hocize...) se la meten por el puro placer... ; que no sea el ano... será por algo... (sí, sé que puse punto y coma después de tres puntos, sustitúyanle por cualquier otra mierda, pero significa etcétera y luego un cambio de idea... ok??)

Puta, es que ya ni en mi propio blog puedo escribir en paz....

Mi pinche escritura demerita, baja de catego, acribillada por la sensatez que se esforzaba siempre en resaltar. Es como ocultar al activista que llevo dentro. Y también poseo un hombre que se enamora de muchas. Y uno que sólo quiere estar con una. Me he aficionado al whiskey, al blues y al café. Soy adicto al sexo por el sexo, al amor desmedido, a la escritura de poesía cursi. Ya me cagué de mí mismo. Y al pensar en la autodestrucción me río por la antagonía entre la consecuencia y la causa (hay que planear la autodestrucción, por lo que resulta un proceso creativo para después deshacer).

¿Será el facebook?

¿He llegado a una andropausia juvenil?

Cambio y fuera, pareja.