sábado, 14 de febrero de 2009

La pluma y la tinta. Divagaciones sobre el hecho de la escritura.


Cuando avisé a una amiga de la creación de este Blog simplemente me miró de forma extraña y me dijo: ¿Pues que no tienes nada qué hacer? Eso al principio me pareció de mal gusto y después me hizo reflexionar, ¿pues es que los que escribimos (iba a decir escritores, pero en mi caso sería escribidor y para no sonar tan poco atractivo, le ponemos un velo de impersonalidad) verdaderamente sólo aportamos palabras al mundo?

Sería curioso realizar un estudio sobre la vida cotidiana de los escritores en la historia de la Humanidad. Un examen en un aula, con todo un día para responderlo, pues los fallecidos podrán dejar un último rastro material en este planeta de esta forma.
Recuerde que los resultados serán publicados y traducidos a todas las lenguas. No se cohíba, usted ya forma parte de la cultura, este ejercicio no modificará la percepción mundial sobre sus capacidades literarias. No se reprima. Exprésese libremente. Tome la actitud misma que solía tener al escribir, alcohol, tabaco y drogas permitidas en la puerta de la derecha y las más pesadas deberán ser compradas en la puerta de la izquierda, sólo trate de mantener la capacidad de ver y escribir. Las drogas no pueden llevarse a los cuates.
Responda con cuidado, con esmero.

1. ¿Se considera usted un escritor, un escribidor o un escribiente?

Pregunta difícil que nos costaría a varios un examen profundo de consciencia, en donde cualquier demonio interno nos pondría en jaque ante las ufanadas pompas airosas y egocéntricas, después dudaríamos en etiquetarnos en cualquiera.

Tal vez tres interrogados inventarían un cuento sobre los personajes, uno haría de esto su fundamento para la apología de la libertad de no ser rotulado, otro reiría mucho al ver la pregunta y contestaría fácilmente, posiblemente veríamos por ahí un no sé; dos más harían un poema enunciando sus sentimientos heridos sobre el juicio de valor que ha acaecido sobre ellos, uno en soneto petrarquista, otro en poesía contemporánea (no rima, no tiene ritmo, no se agrupan los enunciados en párrafos, no hay métrica, pero tiene MUCHO fondo…), y la mayoría dejaría su mente el 80% del tiempo en esta pregunta.

2. ¿Cree usted que el hecho de escribir, definido por la DRAE como 1. tr. Representar las palabras o las ideas con letras u otros signos trazados en papel u otra superficie; 2. tr. Componer libros, discursos, etc. U. t. c. intr.; 3. tr. Comunicar a alguien por escrito algo. U. t. c. intr.; 4. tr. Trazar las notas y demás signos de la música; 5. prnl. Inscribirse en una lista de nombres para un fin; 6. prnl. Alistarse en algún cuerpo, como en la milicia, en una comunidad, congregación, etc.) figura como una actividad significativa para la humanidad? ¿Sus escritos se considerarían dentro del rubro trascendental?
Si yo fuera el encuestado esta pregunta me podría sentimental y compararía, de mala manera, los escritos de Virgilio, los de Platón, los de Víctor Hugo y demás banda literaria importante contra los míos y obviamente me pondría a llorar como un niño al que le compraron un helado y al soltar la primera lamida se le cae la bola al piso sin siquiera percibir el sabor. Envidiaría al primer escritor de la humanidad (ya sé que la escritura es un acto social y no se puede hablar de un primer escritor, sino de un pueblo que como forma de comunicación haya institucionalizado el uso de los signos escritos para su desarrollo… bla bla), pero indudablemente tuvo que haber uno o dos o cinco o los que sean, pero que fueron los primeros. ¿Cómo compararse? El simple hecho de dibujar un signo reconocible por otro fue el acto más valioso que ese ser humano tuvo en la vida, aunque no lo haya podido firmar. ¡Dichoso!, anónimo, pero ¡dichoso! Claro que eso de dibujar pictogramas para comunicarse era todo un arte, y en mi caso mejor hubiéseme dedicado a la oratoria, o la caza, porque los dibujos y yo no hacemos “clic”. Me imagino tratando de dibujar una mujer y más pareciera un trasvesti atropellado que esas hermosas curvas que todos conocemos.

3. ¿Porqué escribe usted? ¿Porqué escribe usted de esa manera específica? Tome esa como la(s) forma(s) más común(es) que usted utiliza en la expresión escrita plasmada en sus textos.
Hay respuestas que me gustaría, de verdad me encantaría leer. Por ejemplo, una respuesta honesta, veraz, sincera, transparente, a la segunda pregunta de parte de Cortázar. Esperando que no me asalte con una respuesta titulada la Continuidad de los blogs, me llenaría y comprendería su faceta. Una respuesta borgiana o alfonsinareyista me encantaría para la primera.
Seguramente hasta Lacan sacaría a relucir a Freud en estas respuestas y pasaríamos por las etapas de niñez de muchos, haciendo regresiones y causando imágenes ya olvidadas, desenpolvando paradigmas.

Y si esto fuera un reality show, sería el más visto por muchos de nosotros que repelamos de ese tipo de entretenimiento, y formaríamos grupos, yo estaría tal vez del lado occidental de la escritura (lo siento Lao-Tsé), apoyando a Lovecraft, a Monsivaís y a Ortega y Gasset. Cada quien su bando, cada quien su camiseta. Y al final, no sería el rating el ganador, ni el que haya vendido más obras, ni el que haya influido más en las letras. Sino el espectador que pudiera, con este simple juego, tomar una pluma y un papel, una compu con un programa par escribir y empezar a plasmarse a través de las letras, por la simple razón de responder estas preguntas. Tal vez sea un idealismo, tal vez sea una imagen mental con formato de kínder y contenido de paja, pero el que logre responder con franqueza estas preguntas (al menos yo no he podido) será una persona con un nivel de autoconocimiento superior al de la media.

Xavier Velasco seguramente me dirá que las historias lo encuentran a uno y que son ellas mismas las que se recuestan sobre la pluma (o el teclado) para ser extendidas en los lienzos de la escritura (como el comienzo de su explicación de la razón de su novel Diablo Guardián), pero al final creo que aunque las historias mueven la pluma, uno es el que decide el color de la tinta.

3 comentarios:

Xóchitl del Carmen dijo...

Seguire tu blog, no entiendo por que nadie se ah puesto como seguidor, ¬¬ que ingratos.
Eres asi como muy... no se.. culto?
eso parece.
jajajaja a lo mejor a tu amiga no le gustan esas cosas, y si tiene razon siendo realistas. Yo no tengo que hacer por eso hice mi blog, :(, aunke otros que si tiene que hacer, solo lo hicieron para escribir o no se, pero yo escribo y les escribo a ustedes!! i me gusta escribir mucho, okupo mi tiempo para leerlos a ustedes, no tengo que hacer.
:(

jajajajaja, si :(, tienes razon en lo que dices.
Oye! :D entonces soy buena escritora? :O!!!
jaja que va!, tengo bien fea ortografia!! :(, y nomas escribo las cosas que me pasan en el dia,Ando escribiendo un novela? no se como llamarle, cuando este la lees.

Buenod dias, semana!!
:D

Nalh dijo...

Hola Isma,
Eres increible, un niño listo, siempre lo supé. El haber estado en el Angloamericano y otras universidades sólo fueron una pauta para darte cuenta que la retórica es lo tuyo, ya lo traías en la sagre desde mucho antes... Es parte de tu personalidad que cumple con su fin de transmitir mucho en los demás.

Las preguntas ya me las planteé y definitivamente tendré que ocupar el poco porcentaje que ocupo de mi cerebrito para plasmarlas en mi blog de notas.
Saludos amigo, sigue con esto me interesa leer más de lo que escribes.
Att: Nancy Hernández (Anglo)

Xóchitl del Carmen dijo...

Te extrañamos por aca Ismael.
Escribete algo.

=)